La mala educación
Un revelador informe señala que desde el 2002 se duplicó el número de alumnos que repiten el clásico tercer año del secundario o primero del polimodal. En el estudio denuncian que de profundizarse el tema generaría exclusión. Mientras tanto hoy ya se comienzan a vislumbrar signos de desigualdad en el acceso a la educación en la provincia de Buenos Aires.
Nota publicada a principios de marzo del 2009
La repetición en las escuelas es la antesala del abandono y de la exclusión. Los alumnos bonaerenses que iniciaron el ciclo polimodal, están en serio riesgo de caer en la desigualdad social. Así lo revela un informe. De cada 100 alumnos que hoy comenzaron el ciclo lectivo en las escuelas bonaerenses, sólo 38 lo terminarán en tiempo y forma. El informe enciende las luces rojas para los funcionarios de turno.Los datos surgen de un detallado estudio recientemente dado a conocer basado en datos oficiales, y alertan también que al cabo de tres años, unos 30 habrán repetido (la mayor parte en el primer año) y se retrasarán, y otros 32 terminarán abandonando. Los fríos números ponen los pelos de punta y ponen en foco a los agentes de la educación de los jóvenes.
El estudio fue realizado por la Asociación por los Derechos Civiles (ADC), quienes en el informe denuncian grandes brechas de desigualdades, en el acceso a la educación en todo el territorio bonaerense.
La reveladora publicación resalta además que desde el año 2002 se duplicó el número de chicos que repiten el primer año del polimodal bonaerense, que equivale al clásico tercer año del secundario.
De esta forma la situación se ha convertido en uno de los filtros más excluyentes de la enseñanza media bonaerense. Las dos terceras partes se pierden en el camino: cada año ingresan 162.000 alumnos y unos 25.500 (16,9%) son chicos repetidores. Otros 15.980 fracasan en los dos años siguientes.
Un escenario complejo en un año político, donde hasta ahora los candidatos no han posado sus ojos en los chicos para ofrecer un proyecto sólido y profundo de educación pública.
EL CASO TECHERA
Mario Techera tiene 14 años vive en el humilde barrio Bustillo de Plátanos, partido de Berazategui. Días atrás el diario clarín publicó una nota de él. El chico o tenía ni útiles, ni zapatillas, y quería estudiar. Vendió 15 de sus 16 patos. Le dieron 150 pesos. Compró todo lo que necesitaba. El caso de Mario golpea y fuerte. Su madre lo abandono y él ahora vive ahora con su padre Vilmar (73), y su hermano (18) (quien padece problemas mentales). Sobreviven al día como se dice. Tiempo atrás Vilmar “cartoneaba”, pero le robaron su chango y su caballo. Así que ahora viven solo con su escasa su pensión.
Mario lucha por estudiar y como a todo chico, le cuesta Matemática. Es ahí donde interviene la provincia y el chico recibe ayuda. Es a través de Mariana, una de las profesionales de la Fundación Cimientos. Ella va a la escuela a dar apoyo escolar a casos como este que pertenece al Programa de Retención y Reingreso. Además cobra la beca de 135 pesos por mes para gastarla en lo que necesite para estudiar. Pero no siempre va el dinero a ese lugar en las casas humildes. A él le gustaría ir a la universidad para ser veterinario y tener su propia veterinaria. Pero es difícil vislumbrar un futuro en estas circunstancias. Miles de alumnos bonaerenses como Mario, tienen sus sueños. Ya iniciaron el ciclo polimodal.
Sin embargo, los chicos transitan por una frágil capa de hielo y que en cuyo fondo esta llena de desigualdad. Es el momento donde los funcionarios deben reaccionar.
ALARMA
Volviendo al informe, este certifica la tendencia en alza que tiene desde 2002 el porcentaje de alumnos que repiten en primer año del polimodal. Ese año repetía el 8,4% de los alumnos. Ahora la cifra trepó al 16,9 %.
El crecimiento se explica, en parte, por la expansión de la matrícula. Sin embargo, el índice de repitencia al comenzar el secundario sigue siendo muy alto: 19,9 %.
A partir de estos resultados la ADC analizó cuatro situaciones ponderables en el diseño de políticas públicas que, por acción u omisión, violan el derecho de los chicos a la educación en la provincia de Buenos Aires. Las variables son: la escasez de jardines de infantes, la situación que viven muchos adolescentes en el primer año del polimodal, el incumplimiento de los 180 días de clases y la desigualdad que padecen en el acceso a la educación los hijos de madres presas.
INFRAESTRUCTURA
Un experto en educación de Quilmes, al ser consultado sobre el tema remarcó otro punto importante a tener en cuenta. La problemática edilicia en las escuelas de la zona. Y además subraya el hecho de que por la cantidad de días de clases perdidos, los docentes sobrexigen a los alumnos con el fin de cubrir el programa en lo que va del año escolar. O sea a menor cantidad de días de clases efectivos mayor presión sobre los chicos.
La cuestión coincide tangencialmente con parte del estudio, donde se resalta que "si un alumno de Florencio Varela o de San Isidro quiere reclamar en la Justicia por no haber tenido 180 los días de clases garantizados por ley, no puede. El gobierno bonaerense desconoce cuántos días de clases tuvo cada escuela".
Por ahora la única información disponible es la cantidad de días de paros. Pero no se registran en forma sistemática las jornadas perdidas por inundaciones, lluvias, falta de gas, problemas edilicios, desinfecciones, jornadas pedagógicas para los docentes o el día del patrono del partido.
VACANTES
Uno de los mayores problemas al que están expuestos los chicos que repiten, es el de conseguir vacantes. En los últimos 25 años, la cobertura educativa se desarrollo y el secundario se hizo obligatorio. Pero por debajo hay un problema encubierto en la zona, el de no matricular a los chicos que repiten.
Cifras oficiales muestran que sobre unas 1000 escuelas del nivel polimodal en el territorio bonaerense, una de cada tres (339) tiene en primer año más del 20 % de alumnos repetidores. Otros 153 colegios sólo admiten hasta un 5% de alumnos que repiten. Esto genera dos circuitos diferenciados en el trayecto escolar de la provincia.
La investigadora Pogré que participo del proyecto atribuyó las deficiencias a una lógica de funcionamiento de la escuela media, de hoy en día debe examinarse profundamente. “Otra cuestión es la cantidad de materias, el número de profesores, el dispositivo escolar, el tipo de trabajo en el aula y el régimen de evaluación, entre otros, son aspectos que conviene revisar, coinciden las responsables del informe. "En muchos casos del conurbano, el chico que llega a esta etapa del secundario es la primera generación de su familia en hacerlo", advirtió.
Para concluir, toda esta discusión se da en un año electoral, en donde esta en tela de juicio la imputabilidad de menores, pero nadie habla de contención para estos chicos en situación de riesgo.
